Comentario
En esta época las tácticas se basaban en la fuerza del escuadrón o unidad completa en movimiento, siendo la táctica más empleada una muy similar a la de la falange macedónica con las sarisas en ristre. Estas sarisas eran las picas con las que se aguantaba el ataque del enemigo, aunque también servían para empujarle cuando se avanzaba. La potencia de fuego provenía al principio de los ballesteros y los arcabuceros. Más tarde, eran fundamentalmente los mosqueteros quienes daban la fuerza de la pólvora disparando en bloque desde los flancos del escuadrón.
En definitiva, armas como el arcabuz, el mosquete, la ballesta, la pica y otras personales para el combate singular como la espada o el puñal, eran las que imprimían el carácter español a los Tercios.